miércoles, 25 de noviembre de 2015

Sonia, una de tantas...

Sonia, es una de tantas mujeres que han perdido la vida a consecuencia de la violencia machista. Da pena pensar que en pleno siglo XXI, los pensamientos arcaicos de posesión de personas, celos enfermizos, maltratos psicológicos y físicos, sigan estando a la orden del día.

Nunca piensas que puede ocurrirte a ti, ni a un familiar, amiga
o vecina, pero a veces ocurre. Y a mí me ocurrió. Una llamada de una madre desesperada al otro lado del hilo telefónico, afirmando que habían matado a su hija de un tiro en la cabeza…. Es escalofriante. Si leerlo ya cuesta, imagínense, escucharlo o simplemente vivírlo en primera persona.

32 años, enfermera y con una hija de dos años, sus sueños quedan atrás por culpa de un desgraciado que hizo de su vida la suya por la fuerza. Un mal nacido, sinvergüenza, egoísta y asesino, que decidió privarla de la vida, por el simple hecho de pensar en una separación por el bien del núcleo familiar. Buena madre y esposa, trabajadora, luchadora y con ganas de comerse el mundo, esto no bastó para que el susodicho no le temblara el pulso.

Pensar que esa persona ya no te podrá regalar una sonrisa, un minuto de charla o por consiguiente su mera presencia cualquier día del año, crea mucha rabia e impotencia, pero aún más cuando ese inergumeno con sed de sangre mancha el nombre de la víctima con falsas excusas, ruines argumentos y mentiras despiadadas, para intenta huir de la justicia por la puerta grande. Gracias a Dios, que todavía en este mundo de locos sigue existiendo personas inteligente y que no se casan con nadie. La lucha incansable de día y noche, llegó a buen puerto, sirviendo para que tú este entre rejas, las únicas compañeras que tendrás durante largas décadas.

M.J., 15 años, estudiante de secundaria, vive años de terror, por estar atada a lo que dice llamar "amor" por un hombre de 35 años que mancha su cuerpo con sucios golpes y lágrimas de cocodrilo cuando reacciona ante los hechos que comete,

Después de 8 años, cuenta la historia con orgullo, el mismo que fue capaz de zanjar esa historia y denunciar  su caso. Hoy felizmente casada, asegura que no volverá a permitir que nadide intente dañarla con esos malos tratos que van ligados a unas consecuencias físicas y psicología difíciles de superar en el tiempo.

A estos mal nacidos de la lacra machista más rancia que han dejado enterrada la memoria de muchas mujeres, deberían ser entregados a la justicia de por vida.

Mujeres jóvenes, adulta, anciana, de este planeta,no importa la edad que tengáis. No permitas el primer golpe. No perdones, huye de la muerte disfrazada de humano sin miedo. Al otro lado hay gente que te apoya y profesionales que no te dejaran sola. Recuerda 016, no se refleja en la factura…

Y a vosotras administraciones, basta de gastar el dinero en campañas de sensibilización social. Destinen esa partida a la educación en valores desde edades tempranas. Necesitamos a esa savia nueva con la lección bien aprendida, pero para ello necesitamos de TÚ colaboración, Papá, Mamá, tutor/as de ese niño o niña.

No dejemos escapar ninguna ocasión para mostrar la realidad a través de las buenas acciones… Borremos del calendario el 25 de noviembre como Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y trabajemos por ello el resto de los 364 días del año. 

Basta de falsedad, concentración, lazos y medallitas varias que quieren colocarse unos cuantos. Por desgracia este tipo de acto, sólo se quedan en eso. Por ello dosifiquemos estas energías en algo productivo y no simbólico. Ellas nos lo agradecerán.  Juntos lo conseguiremos.

NO + VIOLENCIA MACHISTA

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