Siempre los mismos... ¿Y los demás?

Con toda la parafernalia puesta en marcha durante los últimos días a consecuencia del comienzo de campaña electoral de los diferentes partidos políticos, he podido comprobar una campaña más, que la gran mayoría de los que ocupan algún puesto en la lista, van por salir en la foto, como si de un novio o novia el día de su boda se tratase.

Las ansias de protagonismo le pueden al ser humano. No voy a hacer mención a ninguna localidad en concreto, pero mi experiencia a lo largo de las cuatro últimas campañas, me hacen estar en lo cierto. Centrándonos en esta en la que nos encontramos, da vergüenza pensar como hay personas que ocupan listas, sin estar comprometidos con sus siglas. He tenido la oportunidad de estar a pie del caños con varios partidos en los últimos días, y la estampa que se recoge de todos ellos, nada tiene que ver con el compromiso de sus integrantes a la hora de echar una mano para la colocación de carteles o reparto de propaganda. Siempre los mismos. Como diría el refrán "sota, caballo, y rey". Nadie más que los cuatro o cinco de siempre que sin importarles no dormir lo suficiente, estar con sus familias o amigos o pasear, deciden dedicar parte de ese tiempo a cumplir con su palabra y hacer más fuerte ese nexo de unión que crearon en el mimos momento en el que entraron a formar parte del ámbito político.

Hay que recordar que la vida de un político empieza en el mismo instante donde sus ideales toman nombre y apellido en la base de datos de cualquier formación. Hay que estar para las duras y las maduras. No solo para fotografiarnos poniendo un cartel el día de la pegada para subirlo a facebook y luego desaparecer hasta que llegue el momento de figurar con los peces gordos del partido.

Recuerden que el que entra en política es por decisión propia y no por imposición. Para estorbar o jugar puede quedarse en casa o en el bar, o haciendo footing para perder esos kilitos de más.

A todo lo que menciono, me viene algo a la mente sumamente importante en estos tiempos que corren. Y es que si antes había un dicho "siempre hay quien ve" hoy día con las redes sociales, no ven, ten espían. No te puedes permitir el lujo de hacer ciertas cosas por el que dirán o la imagen que des, ya que para lo bueno o lo malo has dejado de ser anónimo para entrar a formar parte de la vida pública y que representa a todos los ciudadanos.

Cuando hablo de imagen no solo me refiero al físico "a las pintas", sino al tomar una copa de más, mostrar a tu pareja en público el amor que os invade en ese momento el cuerpo, no cumplir con la legalidad, etc... Siempre habrá alguien acechando para cogeros en un renuncio. Y no es que no tengáis derecho a hacer vuestra vida, pero por suerte o desgracia ahora os miraran con lupa, queridos políticos.

No os olvidéis que estáis para dar ejemplo, y no para dar escándalos.